Tradición a cubierto
La lluvia obligó a suspender las procesiones del Viernes Santo por la tarde y a realizar la Trencà del Guió en la Basílica de Santa María
MARGA GARCÍA
| ELCHE
La lluvia trastocó los planes de la tarde-noche del Viernes Santo. La cantidad de agua caída en la ciudad obligó a suspender la procesión general vespertina y el Santo Entierro. A pesar de todo, las inclemencias del tiempo, no impidieron que se llevara a cabo una tradición puramente ilicitana, la Trencà del Guió, que se remonta a muchos siglos atrás y por segunda vez, tras el 007, se realizó en el interior de la Basílica de Santa María, en lugar de en la Plaça de Baix como es habitual.
Durante la mañana fue otro cantar. El buen tiempo permitió a los ilicitanos presenciar en cada uno de los rincones del recorrido, la procesión general de cofradías y hermandades en la que participaron El Lavatorio, La Estrella, El Cristo de la Agonía, María Magdalena y la Amargura, cerrando la Virgen del Mayor Dolor y San Juan Evangelista.
Por la tarde, el tiempo empezó a cambiar y los malos augurios se cumplieron. Se suspendió la exposición de tronos en el exterior de la Basílica de Santa María por la alta probabilidad de lluvia, que hizo su entrada alrededor de las 6 de la tarde en forma de aguacero.
La Asamblea de la Junta Mayor de Hermandades y Cofradías se reunió en la sacristía del templo, y ante la persistencia de la lluvia, se decidió la suspensión de la procesión general de la tarde de Viernes Santo. Asimismo se acordó realizar el acto de la Trencà del Guió a las once de la noche en Santa María, por segunda vez, tras su celebración en el 2007 por las mismas circunstancias.
Las diversas cofradías y hermandades comenzaron los traslados de los tronos hasta sus parroquias poco después. El único que lo hizo en procesión, tapado con el plástico fue Jesús Rescatado hasta el Sagrado Corazón de Jesús. Asimismo La Caida y la Virgen del Rosario optaron por mantener sus tronos en la Basílica.
Buen augurio
Ya entrada la noche, con la Basílica a rebosar y a la hora en punto, dio comienzo el ritual de la Trencà del Guió. El Santo Sepulcro, situado a la altura de la puerta mayor y encarado hacia al altar, y la Virgen de los Dolores realizaron un simulacro de encuentro por el pasillo central, liberado de bancos. Tras el trono hizo su aparición la tripleta, compuesto por primera vez por tres mujeres; Eva María Beltrán, Ana María Sánchez y María Ángeles Marco, las tres de mantilla, que se situaron frente a los Dolores para comenzar la ceremonia. Tres pasos los tres componentes, otros tres más, avance de la trencaora, Eva María Beltrán, que tras los tres pasos procedió a la Trencà. La bandera se rompió a la primera, augurando, según la tradición, un buen año para la ciudad.
Tras la tradicional ceremonia, la Virgen de los Dolores inició su traslado en procesión hasta su casa, la parroquia del Salvador, como todos los años. Multitud de fieles vela en mano aguardaron en la Plaza del Congreso Eucarístico su salida por la puerta del órgano. Por su parte la hermandad de Caballeros del Santo Sepulcro también realizó a continuación su traslado en procesión hasta la iglesia de San José.
(NOTICIA Y FOTOS PUBLICADAS EN EL DIARIO LA VERDAD)
